Entrenamientos con calor: beneficios y precauciones

Son muchos los que ya han logrado integrar el ejercicio en su rutina diaria y que mantienen un estilo de vida activo. Aún así, algunos pacientes buscan seguir mejorando su condición y desde la farmacia podemos ofrecer el asesoramiento deportivo que necesitan. El entrenamiento con calor es una gran opción para aquellos que  desean un desafío adicional o una mejora constatable de su rendimiento físico. Sin embargo, es tan importante hablarles de sus múltiples beneficios, como de las precauciones adicionales que requiere.

Beneficios de los entrenamientos con calor

Varios estudios afirman que entrenar con altas temperaturas tiene beneficios significativos. Entre ellos la mejora de la función cardiovascular y el aumento de la flexibilidad, derivados del incremento de la frecuencia cardíaca y de la vasodilatación. 

Otros de los impactos positivos de esta técnica son la mejora de la adaptación a ambientes cálidos o el fortalecimiento de la resiliencia mental. De esta manera, nuestro cuerpo logra aclimatarse al calor, por lo que generamos una mayor tolerancia física y psicológica al malestar.

Pero, ¿es realmente más efectivo?

Los beneficios del entrenamiento con calor son innegables y, sin duda, logran optimizar nuestro rendimiento físico. Sin embargo, sin una adaptación gradual a las altas temperaturas, los efectos serán todo lo contrario.

Asimismo, cabe destacar que la efectividad de esta práctica no está directamente relacionada con una mayor sudoración. Es decir, el nivel de intensidad de nuestro ejercicio dependerá únicamente del tipo de deporte, duración y nivel que apliquemos, no de cuánto sudemos. Además, no liberaremos más toxinas por ello, pues el sudor se compone, principalmente, de agua.

Precauciones al entrenar en altas temperaturas

Es fundamental que seamos conscientes de los riesgos que entraña realizar esfuerzos con altas temperaturas. Por ello, es necesario tomar precauciones extras para prevenir efectos adversos, como la deshidratación o los golpes de calor, entre otros. Algunas formas de atenuar los efectos del calor en nuestro organismo son: 

• Mantener una progresión gradual, priorizando varias sesiones a la semana, pero cortas.
• Prestar mayor atención a la hidratación, especialmente antes, durante y después del entrenamiento 
• Monitorear de forma constante las señales de nuestro cuerpo, de esta manera podremos …